Hace más de diez años, allá por 2010, leí que «la vida pertenece a quien se atreve».

El caso es que no terminé de entender el concepto hasta diciembre de 2020, cuando tomé la decisión de crear un modelo de proyecto mucho más definido. Entonces lo capté: «la vida pertenece a quien se atreve… a vivirla«.

El 90% de la población no vive, sobrevive en un sistema gobernado por la carencia donde la guerra es por ser el número uno, en una incesante lucha de egos, unos contra otros, donde sólo uno triunfa y el resto se sienten frustrados.

En cambio, al abrazar la filosofía de la mejora continua, el foco pasa a nivel interno y se conduce a través del vehículo de la mejora continua.

¿Resultado?

Encuentras lo que te apasiona y eso te lleva, irremediablemente, a ser dominante en tu nicho porque tu actividad emerge del fuego interno de lo que te apasiona.

Y lo más importante: ahí no compites contra nadie, incluso ni contra ti, porque simplemente permites que brote toda tu creatividad. No pararás de mejorar y jamás volverás a sentir frustración porque abandonarás ‘la competición’.

Serás, simplemente, tú. Tu mejor tú.

La mejor versión que puedes llegar a ser y, en esa autenticidad, está tu valor diferencial.

El problema es que muy pocos se atreven a tomar la decisión de serlo porque implica críticas de los demás, ganarse ‘haters’ y estar en una posición permanente de incomodidad y vulnerabilidad, pero… adivina qué.

Forzarse a estar en esa posición es lo que te va a endurecer y potenciar y lo que te dará el feedback suficiente como para saber qué tienes que mejorar y cómo tienes que hacerlo en todo momento, tanto en lo personal como en lo profesional.

Un deseo no cambia nada, una decisión lo cambia todo.

Debes tener muy claro que «el elegido es aquel que se elige a sí mismo» y, por tanto, aquel que escoge crear una marca personal donde el contenido y el valor que se escoja le posicionen como referente.

No es fácil, pero sí es sencillo.

Únicamente has de estar dispuesto a pagar el precio de estudiar y aplicar aquello que te permita construirte como quieres, para después regresar con ese valor para aportárselo a los demás.

Si te atreves a hacer esto, te garantizo que has asentado unos cimientos tremendamente sólidos sobre los que podrás…

Crear tu marca personal.

Una marca personal es tu identidad y le muestra, a las claras, a todo el mundo, quién eres, a qué te dedicas y cómo puedes ayudar a los demás. Si está bien trabajada, siempre dejará una huella, una impronta inconfundible.

¿Cómo puede beneficiarte?

Para empezar tu rostro es tu marca, tu valor, tu esencia y tu identidad.

Cuando defiendes un proyecto bajo tu marca personal, dando la cara, lo primero que consigues es generar y disparar la confianza de la gente en ti por congruencia y autenticidad.

Estás hablando de cosas que le aportan valor a la gente y, si lo haces de forma que tanto un niño de ocho años como un anciano de ochenta te entienda, tardarás poco en posicionarte como referente.

Además, el hecho de ser tú mismo te ahorrará trabajo a la hora de crear la voz y el tono de una marca que, si tuvieras que crear una comercial para un proyecto corporativo, desde cero, te llevaría mucho tiempo, esfuerzo y dinero.

Tú ya eres tú y te comunicas siempre de la misma forma. Tu esencia es genuina y no tienes que cambiarla ni impostarla, porque entonces se percibiría como algo artificial y eso espanta a la gente.

Pablo Domínguez: 'La naturalidad vence y convence'. Share on X

 

– «Vale, Pablo, pero, entonces… ¿Cuáles son los pasos para crear mi marca personal?».

Empezando por dar respuesta a las siguientes preguntas, presta atención:

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Los 2 pilares para vivir de tu marca personal.

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¿A qué te dedicas y cómo puedes ayudar?

Piensa que el cliente ideal o cualquier persona hacia la que te estés dirigiendo tendrá un puntito de «tiranía» -entiéndase bien- porque lo primero que va a buscar en ti siempre es si tienes algo de valor que aportarle.

Si lo tienes, enhorabuena, es el comienzo de todo que propiciará que comience a considerarte una persona relevante para su vida a la que escuchar.

De nuevo, recuerda, todo gira en torno a la dualidad problema – solución.

Si aportas soluciones al problema que tiene esa persona, es probable que puedas causar un impacto en su vida y dejar huella.

¿Cómo hacerlo?

Muestra con nitidez tu valor sólido, es decir, la solución que aportas al mercado, a través de tus diferentes plataformas digitales y preséntalo de forma ordenada y estratégica.

Se trata de que, sólo con acceder a tus plataformas, se note que sabes y eres dominante en tu nicho, que sabes de lo que hablas y, sobre todo y quizá más importante, que te aplicas todo aquello de lo que hablas.

Es decir, se proyecta transparencia y congruencia. Haces lo que dices y dices lo que haces. Eres lo que se ve, sin trampa ni cartón, y se percibe que no eres de los que dicen una cosa y haces otra cosa distinta.

Se consigue cuando tu trabajo te apasiona y disfrutas con él.

 

¿Qué te diferencia del resto?

Todos, absolutamente todos somos diferentes y tenemos algo por lo que podríamos posicionarnos de forma original y única. Sólo has de encontrarlo y, a continuación, saber comunicarlo.

Pero… ¿Cómo reconocer esa característica única?

A través de un símbolo, un elemento, un tótem, un elemento o, en definitiva, de una metáfora que te permita expresar todo lo que eres, con todos tus valores, a través de una única idea con la que te identifiques.

Pero, de nuevo… ¿Cómo identificarlo?

Haz una retrospectiva vital y observa todo lo negativo que te ha pasado en la vida. A continuación, analiza cómo le has puesto solución o, en su defecto, cómo puedes dársela.

Todo lo que necesitaste o que necesitas para resolver esos problemas es lo que te va a permitir diferenciarte y destacar de forma nítida, para posicionarte con una solución, sea en forma de producto o servicio, que lances al mercado.

Piénsalo.

¿Cuál es la metáfora de tu vida y qué elemento o símbolo lo identifica?

Ese conglomerado de cosas conformará una poderosa sinergia de valor, que representa quién eres y, aquí está la prueba del algodón, siempre se alineará hacia una única dirección: tu total desarrollo para poder, a continuación, ayudar a los demás.

¿Cuál es esa dirección? ¿Qué metáfora la representa mejor?

En mi caso es el diamante porque yo partía de bullying, una galopante falta de autoestima, rechazo social y laboral… que me condujeron a apostar por mí mismo y crear mi negocio digital de comunicación y marketing disruptivo.

Y es el diamante porque, traduciendo la situación a la metáfora, los diamantes se forjan en la oscuridad de las profundidades, a temperaturas infernales y bajo presiones insoportables… de las que emerge un valor incalculable.

Ese es mi valor diferencial que proyecto a mi potencial cliente.

¿Cuál es el tuyo?

Encuentra tu metáfora y transmite a través de ella para presentarte ante tu cliente ideal.

Pasarás de ser una marca blanca a una marca única de muy alto valor.

 

¿Qué problema tuviste?

No muchos nos hemos atrevido a atravesar la noche oscura del alma, que es justo lo que tendrías que representar al contar tu historia, como hago yo, a ser posible, sin dramatismo.

Pero, ¿Qué es esa noche oscura del alma?

El momento en el que tocaste fondo en tu vida y el gran problema global al que te tuviste que enfrentar. No es necesario que des demasiados detalles porque podrías caer en cierto dramatismo que no necesitas.

No quieres parecer una víctima, quieres inspirar.

Por principio de similitud, lograrás conectar con tu público si haces un buen storyselling.

– «Ya, Pablo y… ¿Cómo se hace?».

Explica cuál fue la situación global que viviste, las dificultades generales que atravesaste, durante cuántos años, qué te hizo sentir y cómo conecta con ese dolor que dio lugar al punto de inflexión que te hizo a ponerte a trabajar en ti.

Los detalles puntuales de esos problemas guárdatelos para jugar con ellos y dosificarlos en momentos donde estés presencialmente ante tu audiencia o en eventos de larga duración vía online.

Úsalos exclusivamente cuando encajen, por contexto, al citar algún ejemplo que quieras usar de referencia para explicar algo, buscando conectar e inspirar, con el objetivo de generar verosimilitud.

 

¿Cuál fue la solución que aplicaste?

Creo que ya has entendido que ahora deberías explicar el proceso de cambio y de crecimiento: qué encontraste y cómo trabajaste en ello, en tu propia solución, para salir de esa situación tan complicada.

Aquí sí puedes ofrecer algunos detalles que den verosimilitud a tu proceso, porque pretendes inspirar con tu solución.

Por ejemplo, puedes hablar de las herramientas que encontraste y cómo te ayudaron a crear tu proyecto, cómo te impulsaron en ese cambio de mentalidad, profundizar en qué encontraste de valor por el camino para regresar con ello y ayudar a los demás…

También suele existir la tentación de hablar en este punto de los mentores con los que se trabaja.

En tus plataformas, inicialmente, no debemos mencionarlos porque, aunque hayamos aprendido con ellos y sintamos gratitud por lo que nos han enseñado, somos nosotros quienes hemos obrado la transformación y el crecimiento.

Ya tendrás tiempo de hablar, puntualmente de ellos, más adelante. Bien cuando te pregunten o bien cuando vayas a realizar una nueva formación con alguien de jerarquía superior en tu nicho. Entonces sí te dará más autoridad.

Pero de entrada, dale valor al trabajo de crecimiento que has hecho tú, porque lo tiene e importa.

 

Conviértela en contenido estratégico.

Aquí está una de las claves más importantes en todo proyecto, máxime si es digital: la estrategia.

Una vez que tengas todas las preguntas anteriores resueltas, llega el momento de darle forma a toda esa información y distribuirla correctamente a lo largo de toda tu plataforma.

¿Qué hice yo?

Sintetizar toda la información en mi página de sobre mí, desde la que enlazo a una trilogía de publicaciones en el blog sobre desarrollo personal donde enfoco el mismo problema del crecimiento holístico desde tres puntos de vista conectados por narrativa y que trabajan sobre el mismo símbolo: la montaña y su ascensión.

Puedes modelar esta estrategia, siempre que todo lo que hagas sea auténtico, tuyo, genuino y original.

De manera que dale forma a tu historia y plantea tu propia trilogía a partir de tu propio símbolo.

Cuando creas algo con esta autenticidad, adquieres la habilidad y el poder de embelesar para conectar con cualquier persona como consecuencia de ver su historia en tu historia, por inspiración y empatía.

Y todo, siempre, desde una comunicación positiva.

 

Conquista a tu audiencia.

Todo éxito se cimenta en hacer las cosas bien, cueste lo que cueste.

Para ello debes comprender que no puedes ir a buscar ventas de forma directa, sino que tendrás que ofrecer contenido gratuito para captar la atención y, después, tener tu propia estrategia para reimpactar a tus potenciales recurrentemente.

En el 99,99% de los casos, no se vende en la primera toma de contacto; ahora bien, la primera impresión que ofrezcas es crucial para despertar cierto interés, así que mima la experiencia de usuario de tus potenciales.

Haz que se disfrute el viaje a través de tus plataformas y tus contenidos.

Lo lograrás si le pones corazón a lo que haces porque ahí estarás poniendo en juego la voz de tu experiencia, algo cuyo valor va más allá de la propia teoría y la práctica; compartir lo que tú hayas experimentado en primera persona es incalculable.

Tus usuarios lo agradecerán.

Haz lo que dices que haces, sé el ejemplo a seguir.

Encontrarás muchas personas en tu camino que hablen de lo que hay que hacer pero, usualmente, harán algo distinto.

Somos muy pocos los que damos ejemplo con hechos: enseñando lo que hacemos y haciendo lo que enseñamos.

De manera que, por favor, sé congruente. Todo empieza y termina ahí.

– «Vale, Pablo, pero… ¿Cómo conquisto a mi audiencia?».

Simple: ponle corazón, pasión e intensidad a tu comunicación.

Sé tú mismo y habla de lo que sabes con energía. Irremediablemente terminarás conectando con las personas afines y correctas.

 

La prensa, tu aliada.

Bien, ante todo quiero que entiendas cómo funcionan los medios de comunicación y cómo pueden ayudarte.

Los medios de comunicación tienen gran difusión, sí, y pueden ayudarte a tener un empujón de visibilidad en un momento puntual en el que aparezcas. Ahora bien, no pienses que te solucionarán la vida por el hecho de salir en medios.

Piensa que los medios de comunicación publican cantidades ingentes de noticias e información, y tu noticia se suele perder entre tanto ruido con gran facilidad.

Entonces…

¿Cómo sacarle partido de verdad a la prensa?

Recogiendo todo lo que se publique dentro de tu página web: artículos en papel, en digital, entrevistas grabadas, podcast de radio o cualquier otro formato que se te ocurra.

Habilita un espacio en tu web donde recojas todas las apariciones íntegras, indistintamente del formato y, a continuación, incluye en la portada de tu web un espacio «me has visto en…».

Así generarás autoridad y confianza.

– «Ya, pero… ¿Cómo consigo aparecer ahí?».

Empieza por redactar una nota de prensa del lanzamiento de tu proyecto, o de su marcha si ya tienes cierto recorrido, basada en los beneficios de lo que haces. Es decir, en cómo puedes ayudar a los demás.

A continuación escoge aquellos medios de comunicación en los que desees aparecer y recopila sus correos de contacto a los que enviar tu nota de prensa.

También puedes llamar a su teléfono directamente diciendo que te gustaría que tu proyecto apareciera en ese medio de comunicación, para que te asesoren qué has de hacer, pero te dirán algo muy parecido a lo que te he explicado.

Así que ya sabes, juega la baza de los medios de comunicación en tu estrategia de contenidos digitales.

 

Arquetipos de marca.

De acuerdo al tipo de proyecto que estés desarrollando, deberás comunicar de una forma o de otra tanto a nivel de mensaje como de identidad visual.

Por eso te invito a que te estudies los doce arquetipos de marca que existen, te ayudarán a dotar de congruencia, a nivel holístico, tu proyecto, facilitándote la relación con los demás.

Por eso te preparé este artículo dentro de mi blog donde te lo explico todo.

Como verás, conforme vayas leyendo, habrá dos o tres arquetipos con los que conectarás, uno especialmente, y el resto te resultarán indiferentes.

El punto es que conectes lo que ya eres con el estilo comunicacional que más te encaje.

Una pista la suelen dar los colores. En mi caso el rojo o granate y el dorado han estado siempre presentes en mi vida y he sido consciente de ello ya con el proyecto casi casi terminado para ver la luz.

Mi marca, por tanto, encaja con la del líder o gobernador.

Sé que es así por que es congruente con mi forma de comunicarme y de ser, que entendí tras trabajar con el Process Communication Model y con el eneagrama, que también pueden darte bastante luz para construir tu marca en caso de que no tengas las cosas claras.

Así que para reconocer tu arquetipo, presta atención a tu esencia personal y profesional y, a partir de ella, crea y construye.

 

Recuerda, trabaja con estrategia.

Como sabrás, vengo insistiendo de forma recurrente en que las páginas web corporativas han quedado obsoletas.

Como te explico en «La muerte de la web corporativa«, el usuario ya no quiere ver cuántos títulos tienes, cuáles son los roles de tu equipo o cuáles son las características técnicas de tu actividad.

El usuario quiere que le hables en su mismo idioma, es decir, utilizando palabras simples y hablando del beneficio de aquel trabajo que puedes hacer por él para ayudarle a conseguir sus objetivos.

Es decir, como te decía al comienzo del post, que tanto un niño de ocho años como un anciano de ochenta comprendan sin problemas de qué va tu historia; que entiendan qué tienes de valor y cómo vas a ayudarles.

Ahí está la verdadera ganancia, en saber comunicarte sin tecnicismos ni «palabros» rimbombantes.

Te aseguro que la gente lo agradecerá y empezarás a generar clientes.

A partir de ahí, crear toda la estrategia de venta será mucho más sencillo porque estarás trabajando todo desde los principios fundamentales esenciales de las relaciones humanas: la claridad, el valor y la confianza.

Si tu marca personal respeta todo lo que te he explicado y lo trabajas a conciencia, tal como hice yo, lograrás despegar.

Y un último consejo, para cerrar este post más breve de lo habitual.

Por favor, ponle corazón y pasión a las cosas. A todo lo que hagas. Es una garantía de hacer las cosas bien, que a la vez es lo que más trabajo cuesta, pero también lo que más alegrías da.

Es todo por hoy.

¡Espero haberte sido útil!

¿Quieres más? Te veo en el mentoring.

Mientras tanto, ¡te espero en el siguiente post!

Os veo dentro, un fuerte abrazo querida manada.

#LaPasiónAlineaTuVida❤️‍

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